Vamos a hablar de la regla porque, como mujeres deportistas, parece que hablamos de otras muchas cosas. Comentamos los kilómetros y nuestro ritmo. Los vatios y nuestro peso. Nos contamos cuántas horas dormimos y cuántas calorías consumimos. ¡Incluso de qué tal vamos al baño! Pero no hablamos abiertamente de la regla, lo que es un poco locura, ¿no te parece? Porque si eres una deportista o entrenas a chicas que hacen deporte, o tu hija es una deportista en ciernes, la regla cuenta. Claro que cuenta.
Así que, les preguntamos a las deportistas de Strava cómo influye la regla cuando entrenáis y practicáis deporte. Nos respondisteis más de 14 000 en todo el mundo. Y nos contasteis algunas cosas realmente increíbles.*
Resulta que, como mujeres jóvenes, no es frecuente que nos enseñen a manejarnos en los mundos coexistentes del deporte y la regla. Más del 70 % nos contasteis que nunca habéis recibido información sobre el ciclo menstrual y el deporte. De hecho, cuando pensamos en el tándem regla y deporte, nos lo imaginamos como enemigos que se enfrentan, en vez de como colaboradores que trabajan juntos. Pero, sorprendentemente, el 78 % de vosotras afirmasteis que, de hecho, reduce los síntomas relacionados con el ciclo menstrual. ¡Bastante guay!
Vamos a ser honestas, es un rollo tener la regla y no siempre apetece salir ahí fuera cuando tienes calambres o te sientes hinchada. Más del 90 % de vosotras dijisteis que el ciclo menstrual influye en el entrenamiento, pero, lo que es más asombroso, es que menos de 1 de cada 5 mujeres que tienen entrenadores han hablado sobre su ciclo menstrual con ellos. Ahí está el problema, porque la regla es importante. Y sé de primera mano lo importante que es.
Yo, al igual que otras mujeres deportistas que conozco, caí en la trampa de creer que todo sería mucho más sencillo sin la regla. Y que tampoco era de tanta importancia. La regla era algo incómodo de lo que quejarnos, en vez de alegrarnos. Con la menstruación, mi cuerpo estaba cambiando. Se estaba volviendo más femenino, se redondeaba y suavizaba, de tal modo que contradecía todo el trabajo duro que había hecho. Con la regla ganaba peso y me ralentizaba, y eso no debe pasarle a una deportista, ¿verdad?
Empecé a alimentarme de forma inadecuada, provocando una gran diferencia entre la energía que consumía y la que necesitaba para los entrenamientos. Mi cuerpo interrumpió el ciclo menstrual con el fin de ahorrar energía y no volví a tener la regla en ocho años, un síntoma conocido como amenorrea. Creía, al menos al principio, que hacía lo adecuado. El hecho de no tener la regla, me hacía más deportista. Tras sufrir varias fracturas por estrés debido a los bajos niveles de estrógeno, sé que tener una regla regular se trata de otra señal más de disfrutar de entrenamientos saludables, como lo son los récords de tiempo y las medallas.
Aunque la regla pueda ser un estorbo, es una muestra de que nuestro cuerpo funciona. No tener la regla durante un mes o dos por hacer ejercicio no es normal. Y no tenerla durante seis meses u ocho años en mi caso, puede ser un desastre para tus huesos, las hormonas y los objetivos deportivos que te marques. Creía que el hecho de no tener la regla, me hacía mejor deportista. De hecho, significaba que incluso un día no podría ni practicar deporte.
Pero, ¿cómo se supone que íbamos a saber todo eso cuando nadie nos había hablado de la regla? Además, ni siquiera los entrenadores nos preguntan por el ciclo menstrual o a nosotras nos da mucha vergüenza sacar el tema. Tuve muchísima suerte porque me entrenó una persona que estaba dispuesta a hablar del ciclo menstrual y mis compañeros de equipo se alegraron de que volviera a tener la regla como cuando tengo los mejores resultados en un entrenamiento. Aunque suene extraño, todo esto se debe a que nos han metido en la cabeza que la regla es un asunto privado.
Strava cree firmemente que las deportistas merecen tener información sobre la regla y que las más jóvenes merecen crecer en una cultura que celebre el ciclo menstrual como una señal de salud y no como un tabú que debe esconderse debajo de la alfombra. Necesitamos que los entrenadores y nuestros compañeros de entrenamiento entiendan el ciclo menstrual y que no teman hablar de él. Del mismo modo que le diríamos a nuestro entrenador que nos sentimos mal o que los vecinos han tenido una discusión que no nos ha dejado dormir en toda la noche, deberíamos poder tener una conversación sobre la regla.
Una conversación sobre la regla abre la posibilidad de entender y hacer un seguimiento del ciclo menstrual durante el entrenamiento: comprobar si es regular y controlar cómo te sientes puede ayudar a maximizar tu rendimiento deportivo y tu estado de salud. Por eso, estoy encantadísima de que Strava se haya asociado con FitrWoman. La aplicación FitrWoman brinda a las mujeres deportistas la oportunidad de realizar un seguimiento del ciclo menstrual, así como de recibir consejos sobre entrenamiento y nutrición adaptados a los cambios hormonales que se producen durante ese periodo. Puedes sincronizar Strava con la aplicación FitrWoman para realizar un seguimiento de las actividades y del ciclo menstrual en la misma pantalla con lo que será más fácil consultar cómo influye el entrenamiento en la regla y viceversa.
El seguimiento no hace que de repente se hable abiertamente de la regla o que estemos encantadas con ella, pero es un punto de partida para comenzar a definir el ciclo menstrual como otra medición del entrenamiento. Sirve de ayuda para saber cuándo le has exigido mucho al cuerpo, o para explicar por qué te sientes tan cansada. Además es una buena forma de que comiences a tomarte en serio si algún mes no tienes la regla. Porque la regla cuenta. Y mucho. Los ciclos menstruales importan más que los kilómetros, los récords personales, tener abdominales o unos muslos tonificados, porque nos mantienen más fuertes, resistentes y capaces de practicar los deportes que amamos. ¿Y qué podría ser más importante que eso?
*14 184 deportistas de Strava completaron la encuesta dirigida por la científica deportiva Georgie Bruinvels de la St. Mary’s University y cocreadora de la aplicación FitrWoman. Las participantes en la encuesta eran miembros de Strava del Reino Unido, Irlanda, Estados Unidos, Brasil, Francia, España y Alemania.