Fuego y agua. Negro volcánico y azul atlántico. Pinares sombreados y acantilados sobre el océano. La Palma es una isla de luz y contrastes, un tesoro de las Canarias prendido del cielo con una hilera de volcanes. Cada año, a principios de mayo, miles de corredores acuden a la isla de La Palma atraídos por la Transvulcania. La Transvulcania, prueba emblemática de las Skyrunning World Series, es uno de los trails de montaña más prestigiosos: 73,4 kilómetros que parten del mar para discurrir, luego, sobre una corteza volcánica, y atravesar los senderos boscosos del corazón de la isla hasta llegar a la cumbre, el Roque de los Muchachos, a más de 2400 metros de altitud. Todo ello, antes de sumergirse de nuevo, brutalmente, en el océano, en una playa de arena negra, al final de un interminable descenso de más de 18 kilómetros.
Este año, bajo un cielo azulisimo, la Transvulcania ha desbancado una vez más los quads y ha abierto los maravillados ojos de sus 1700 participantes. Reserva de la biosfera reconocida por la UNESCO, La Palma ya hace tiempo que dejó de ser un secreto para los senderistas de todo el mundo, que vienen todo el año a entrenarse por los senderos del recorrido. Paisajes que te dejan sin aliento, desniveles espectaculares y terrenos variados: la isla está cubierta de numerosos segmentos. Hemos elegido los cuatro más emblemáticos para revivirla.